Discusiones, alteraciones del ánimo que no con culpa nuestra puesto que vienen impuestas y provocadas por una presión brutal de nuestra situación diaria.
Lamentablemente esta es la cara oculta del sistema en que nos hallamos mi mujer y yo. Las tensiones que se generan, que alteran el ritmo rutinario del día, es como un volcán alimentándose mutuamente hasta que uno de los dos, o ambos, explotamos y las víctimas son las colindantes en la ladera de nuestra vida... nuestros seres más queridos.
No justifico, aclaro, detallo y describo.
Ha sido un mal día, fue una mala tarde y noche.
La espera sin esperanza... es aniquiladora del alma más resistente.
No fuimos educados para no hacer nada. No sé vivir sin construir, no sé vivir mirando el reloj.
No hay comentarios:
Publicar un comentario